Enviado por Mr.Skink en Destacados, Tattoo | 0 Comentarios
La máquina de tatuar

Los orígenes de la máquina de tatuar vienen desde hace cientos de años cuando en Asia, África y la polinesia usaban cinceles y gubias como herramientas, que eran más primitivas y se trabajaba manualmente la inyección de la tinta.
De estas herramientas nace la forma de la inyección de tinta con agujas, pero la máquina de tatuar empieza con un primer invento de Thomas Alva Edison, la pluma eléctrica, creada en 1876 y que fue parte de la evolución del telégrafo, como una versión que no sólo hiciera agujeros en el papel sino que lo impregnara de tinta tambien. Fue creada con el fin de hacer copia de manuscritos o ilustraciones con una guía perforada que se superponía en el papel.
En 1891, Samuel O’Reilly conoció la máquina de Edison y modificó su punta para papel por el sistema de tubo y aguja. Esta máquina está basada en tecnología rotatiba, pero 20 días despues de que O’Reilly sacara la patente, el londinense Thomas Riley patentó una nueva máquina de bobina, que originalmente era un timbre modificado.
La máquina de dos bobinas fue creada por Alfred Charles South, tambien de londres, pero esta máquina era tan pesada que se amarraba un resorte desde el techo para ayudar a sostenerla.
A partir de entonces lás máquinas de tatuar han evolucionado mucho, cada vez más compactas, libianas, firmes y los desarrollos de nuevos inventores han llegado hasta la máquina neumática. Sin embargo la tecnología sigue avanzando y ya se han adelantado estudios de las máquinas robóticas que hacen la inyección de tinta con la presición de una impresora 3D.