Los Tatuajes y la donación de sangre

Donar sangre es uno de los actos más importantes que podemos hacer para ayudar a otros, pero en ocasiones los tatuajes son un impedimento para lograrlo. En este artículo te explicaremos todo lo relacionado con el tema de la donación de sangre y los tatuajes.

Para empezar es importante tener en cuenta que la sangre que se dona pasa por varios exámenes para determinar que está sana, pero no todos los virus adquiridos se manifiestan inmediatamente en la sangre de los portadores, algunos como la hepatitis pueden tardar semanas o meses en positivisarse.

Las Hepatitis B y C se puede contagiar a través de heridas, jeringas y agujas contaminadas, contacto sexual o sangre infectada usada en transfusiones. También el VIH es una de las principales enfermedades que pueden transmitirse y tarda en detectarse.

Es un mito que por el hecho de tener tatuajes no puedes donar sangre nunca, pero si es cierto que hay un tiempo de espera de entre 4, 6 meses o un año después de haberte hecho un tatuaje para poder calificar como donante, esto varía según las políticas de la Cruz Roja Internacional que entre un país y otro tienen sus propias regulaciones.

Los mitos nacen en décadas pasadas donde el arte del tatuaje era un poco más empírico y los tatuadores debían soldar sus propias agujas y armarlas a medida. Por falta de tecnología y conocimiento de la transmisión de enfermedades, algunos tatuadores lavaban sus agujas y las reutilizaban, contagiando así enfermedades de una persona a otra. Desafortunadamente esta mala práctica aún la realizan en los conocidos estudios de garaje o algunos tatuadores inescrupulosos que no valoran la salud de sus clientes, por eso recomendamos siempre que a la hora de tatuarse se ponga mucha atención a los insumos que usa el tatuador, que abra las agujas siempre delante del cliente y que el manejo de la bioseguridad sea riguroso.

Tampoco pretendemos llenar de terror a los lectores, en tantas décadas que han transcurrido los desarrollos tecnológicos han permitido que las agujas sean fabricadas con estándares de calidad a la altura de los insumos quirúrgicos que usan los hospitales, así que no hay por que temer más que a un tatuador que no sea confiable. Recuerden que los tatuajes baratos salen caros y los bajos precios pueden relacionarse con compra de insumos de baja calidad o reutilización.

Cuando donamos sangre estamos dándole vida a alguien que lo necesita, así que invitamos a tener conciencia sobre la importancia de donar sangre y ser responsable con el manejo de esta.
Nuestra piel es de colores, pero nuestra sangre es rojo vida.